La casa de la muerte…

… Sarah Pinborough.

Colección: Runas
Páginas: 248 
Publicación: 17 de septiembre de 2015
Precio: 16,00€
I.S.B.N.: 978-84-9104-114-6
Formato: Estándar, Papel
Tamaño: 14,50 x 22,00

Sinopsis

Un rutinario análisis de sangre trastocó por completo la vida de Toby. Apartado de su familia, vive ahora en la Casa de la Muerte con otros jóvenes bajo la atenta mirada de la supervisora y su equipo de enfermeras. Esperan la aparición de los primeros síntomas de la enfermedad. Cualquier signo de que algo ha cambiado en ellos. Entonces es el momento de llevarlos al sanatorio. Nadie vuelve del sanatorio.

Toby pasa los días absorto en sus recuerdos y preguntándose cuánto tiempo le queda. Hasta que llega alguien que rompe esa frágil calma y hace que todo cambie.

Fuente: alianzaeditorial

La autora

Sarah Pinborough (Buckinghamshire, 1972) es una escritora británica, conocida por sus novelas de horror y misterio, aunque también ha publicado varios libros de fantasía juvenil bajo el seudónimo de Sarah Silverwood.

Debido a la carrera de su padre como diplomático, gran parte de la primera infancia de Sarah la pasó viajando en el Oriente Medio. Desde la edad de ocho hasta los dieciocho, Sarah asistió a un internado, que ella afirma que ha influido en su escritura.

Pinborough se preparó para ser maestra de la escuela secundaria después de un breve matrimonio, mientras sigue escribiendo sus novelas. Enseñó durante tres años en el Lord Grey School antes de pasar a Lea Manor High School en Luton. Vive en Londres.

Ha sido ganadora del British Fantasy Award de relato, y tres veces finalista del de novela. También ha sido nominada al World Fantasy Award. Como guionista ha escrito para series de la BBC y tiene una película de terror en desarrollo. Además es la autora de una trilogía policíaca que está siendo adaptada a serie de televisión.

Fuente: compartelibros

Mis impresiones

Cuando vi esta novela entre las novedades de Alianza reconozco que me cautivó su misteriosa portada pero cuando vi que formaba parte de la colección Runas y leí la sinopsis me produjo tanta curiosidad que no pude resistirme.

Ha sido mi primer acercamiento a esta autora de la que no conocía nada y sinceramente… me ha convencido tanto la historia como la narración con la que nos deleita a lo largo de sus 248 páginas.

La casa de la muerte es un lugar donde viven poco más de una decena de niños aunque la cantidad puede aumentar o disminuir en función de cómo transcurran los hechos. Estos niños tienen todos una característica común: son defectuosos. Esta «defectuosidad», como así le llaman ellos, puede aparecer, por desgracia, únicamente antes de que cumplan la mayoría de edad y se muestra a partir de unos análisis de sangre «rutinarios» a los que se ven sometidos durante toda su infancia. Si dan positivo en «defectuosidad» en algún momento de sus vidas rápidamente son trasladados a La casa de la muerte. Un lugar en la que tratan de llevar una vida normal, que se se basa en la rutina. Allí tienen sus clases, bajo la atenta mirada de sus profesores, empleando para ello libros que podrían considerarse antiguallas pero cumplen su función, tienen sus horas de juegos en un patio exterior, sus comidas y sobre todo, sus horas de sueño establecidas.

Si habéis leído hasta aquí os estaréis preguntando qué es lo que hacen estos niños en esa enorme mansión transformada en internado. Pues esperar a que esa «defectuosidad» empiece a mostrar sus primeros síntomas y ser trasladados a lo que ellos llaman el sanatorio. Un lugar al que se accede mediante un ascensor. Cuando un defectuoso atraviesa el ascensor ya nunca más volverá.

Esta es la trama que se mantiene durante toda la novela y que la autora presenta desde el inicio de la misma. Es curioso cómo a pesar de tratarse de algo que ya sabes desde las primeras páginas te mantiene alerta sobre el modo en el transcurren los acontecimientos.

Como en casi todos los internados en La casa de muerte hay dos bandos aunque no son realmente bandos enemigos. Simplemente están divididos en dos habitaciones y cada habitación tiene su «líder». La competición es más bien simple… ¿Qué habitación perderá más huéspedes?

De esta forma tenemos a Toby, el protagonista esencial de la novela y Jake, el líder de la habitación contigua. Sus vidas están más unidas de lo que pueda parecer, están ligadas por un destino común al que podrán llegar cuando menos se lo esperen.

Lo peor de todo esto es que ellos conocen los síntomas. Ya los han vivido en las carnes de sus predecesores en demasiadas ocasiones; cuando la «defectuosidad» se presenta lo hace de repente y ahí es donde me ganó esta novela. Una historia que compagina la dureza de un desenlace fatal con la fuerza de los lazos que unen a cada uno de los protagonistas, nublados por un futuro incierto. Con una narración pausada pero con una tremenda carga emocional que no me esperaba para nada y que ha sido realmente conmovedora.

La autora nos muestra con unas simples pinceladas unas personalidades increíbles que no te dejan indiferente. No podría escoger un solo personaje, todos tienen algo que los hace especiales y con los que te encariñas de tal forma que cada pequeño detalle te hará reflexionar sobre la fortaleza de la amistad, del amor adolescente y sobre todo, de lo que se puede llegar a hacer para aprovechar cada minuto que vivimos, sin rendirnos, y los sacrificios que somos capaces de hacer para que los que nos rodean vivan sin desperdiciar ni un solo minuto de su existencia. Porque todos morimos… Lo importante es cómo elegimos vivir.

Una lectura en la que me adentré pensando encontrarme con una novela escalofriante y que misteriosamente se ha convertido en algo que no creo que olvide en mucho tiempo. Muchas gracias por esta historia.

Eris