Reseñando la tetralogía Una vez…

… de Morris Gleitzman.

Una vez apunté esta trilogía, dispuesta a hacerme con ella enseguida y no sé por qué la iba dejando y dejando pasar. Teniendo en cuenta que esta temática es de mis favoritas ya tenía que estar, a estas alturas, más que leída y releída… Pero no… Entonces, el 27 de enero de 2015, día en el que se cumplían 70 años de la liberación del campo de concentración de Auschwitz la vi en una lista de libros recomendados sobre el holocausto y no me lo pensé más. Me hice con el estuche donde venían los tres volúmenes que la componen. Después me di cuenta de que no se trataba de una trilogía sino de una tetralogía, con lo que me puse en contacto con Kailas y ellos amablemente me cedieron el ejemplar de la última parte. Ahora, recordando los cuatro volúmenes que ha escrito Morris Gleitzman sobre la vida de Félix no puedo dejar de recomendarla.

Es posible que conozcas que los títulos de la tetralogía no van en el orden en el que te las he presentado sino en este: Una vez – Entonces – Ahora – Después. Yo los he leído en el orden que han sido publicados pero si tienes la oportunidad de elegir, personalmente recomendaría que el orden fuera Una vez – Entonces – Después – Ahora. Este último es el orden cronológico de la historia. Bajo mi punto de vista creo que el autor escribió primero la trilogía y una vez publicada ha podido darse cuenta de que faltaban algunas cosas en la vida de Félix por zanjar y decidió retomar la historia para que no quedara ningún cabo suelto. Una vez leídos los cuatro volúmenes os diría que ya está todo resuelto y que no os quedará nada en el aire, como me pasó cuando leí ahora que noté como había algunas cosas que tenías que suponer que habían pasado. Si los lees en otro orden es posible que te “autoespoilees” algún punto de la historia, quizá no demasiado grave o quizá sí… Depende como te lo tomes…

Las tres historias, Una vez – Entonces – Después, que se funden en una única historia de unas 760 páginas se centran en la vida de Félix desde 1942 hasta 1945. En Una vez y Entonces, quizá para mi gusto las más emotivas y desgarradoras, nos muestran un Félix que con tan solo 8 años comienza a hablarnos de por qué está viviendo en un orfanato católico siendo judío. Su ignorancia sobre los hechos que han comenzado a ocurrir a su alrededor es tal, que en las primeras páginas todavía da gracias a Dios, a Jesús, a la Virgen María, al Papa y a Adolf Hitler. A lo largo de la novela irá recortando y cambiando esa lista a la que muestra sus agradecimientos. Con ánimo de descubrir lo que está ocurriendo y a donde han ido sus padres, Félix se escapa del orfanato. Desde ese momento le ocurrirán un montón de aventuras de las cuales NI UNA SOLA tiene desperdicio. A veces con humor, por supuesto, un humor relativo porque la situación obviamente, no tiene ni pizca de gracia, pero reconozco que una sonrisilla cariñosa sí se me ha escapado, porque Félix es… De lo más imaginativo.

Aunque lo que más me ha llegado dentro es justamente cómo Félix se va dando cuenta poco a poco de la situación en la que está metido. Una situación que, aunque todos conocemos de antemano, me sorprende cada vez que abro las páginas de una novela, o simplemente, cada vez que lo pienso. En Entonces la historia comienza exactamente a continuación de la anterior como dos piezas de un rompezabezas. A partir de este momento, su misión es evitar que los nazis lo descubran y tratar de conseguir un poco de estabilidad para alimentarse e ir sobreviviendo. Quizá en esta parte no es tan, tan llamativa como en la primera la ingenuidad de Félix pero en parte me parece normal ya que imagino que lo que ha querido mostrar el autor es que un hecho como este te hace madurar de golpe. El personaje que para mí destaca en esta segunda parte es Zelda, la nueva amiga de Félix, por su ingenuidad, por el vínculo que crea con Félix y la gracia que tiene para sacar el lado bueno de las cosas.

En después la personalidad de Félix cambia totalmente. Ya no es el niño ingenuo de 1942. Estamos en 1945 y con 11 años ya sabe que lo que quiere es acabar con los nazis para siempre. Se adentra en el bosque para ello y pasa a formar parte de una pequeño grupo de partisanos de los que aprenderá a defenderse y de donde saldrá su vocación profesional para el futuro. La historia de Félix es una historia marcada por la guerra que le ha tocado vivir. De ella ha aprendido muchas cosas… La muerte de sus seres más queridos y de otros a los que ha llegado a odiar más que a nada en el mundo. Y con todo eso que ha aprendido nos llega Ahora. Su vida en la actualidad en una pequeña casita de campo que durante una temporada comparte con su nieta Zelda. Ella es la que cuenta la historia y lo hace compaginando las situaciones que se les presentan a ambos con el pasado de su abuelo. Un pasado al que ahora se enfrenta. Félix aún tiene mucha valentía que demostrar para ello.

A pesar de que algunas críticas que he leído indican que el ritmo va bajando mucho con respecto a Una vez y entonces, tengo que deciros que yo no estoy de acuerdo. Es normal que el ritmo vaya bajando a medida que Félix va encontrando estabilidad en su vida. Me ha parecido una tetralogía estupenda que se te queda en la memoria. Morris se mete en la mente de un niño de 10 años, a mi juicio, mostrándonos un Félix y una Zelda que resuelven las situaciones que se le presentan de una manera que perfectamente hubiera podido ser real. Traza unos personajes muy bien adaptados a su edad que te conmueven e incluso en ocasiones te harán reír. Si a eso le sumas algún final que, en la segunda parte sobre todo, no me esperaba para nada… Solo me queda deciros que le hagáis un hueco porque realmente es una historia que merece ser leída. Dura pero imprescindible.

El autor de esta tetralogía es Morris Gleitzman. Nacido en 1953 en Inglaterra emigró en 1969 a Australia, estudió Periodismo y trabajó durante diez años como guionista en televisión. Es autor de un gran número de libros, columnista, humorista y especialista en literatura infantil e juvenil. Su mayor atractivo es que narra las relaciones entre niños y adultos desde el punto de vista del niño, y con gran sentido del humor. Su tetralogía encabezada por el título Una vez, es para adultos, pero protagonizado por niños.

Esta reseña fue realizada para la edición de julio de la revista @RComentamos en la que participo y que os invito a visitar muy fácilmente desde aquí o pinchando en la barra lateral (si me visitas desde un ordenador) o desde el fondo de la página (si lo haces desde un móvil o una tablet)

Muchas gracias a la Editorial Kailas que por el ejemplar de Después que me permitió completar esta estupenda tetralogía.

Podéis encontrar más información de cada una pinchando en cada una de las portadas. Además podéis pinchar en la imagen del autor para acceder a su página web.

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